sábado, 13 de septiembre de 2008

También hay que moverse en tierra firme


El ser humano puede elegir el medio de su preferencia por placer o pasión, pero su hábitat por naturaleza es la tierra firme y en ese espacio también debe moverse y sin dudas tratando de disfrutar ya que es en el espacio que está la mayor cantidad de tiempo.
Pensando en lo anterior, es que elijo la moto como vehículo de placer, sin dudas un automovil es más cómodo, confortable y social ya que uno puedo compartilo con la familia o amigos; pero el placer de manejar se produce en una moto, uno se desplaza de un lugar a otros sintiendo que está haciendo eso, sintiendo el aire que lo roza, estando en cada movimiento en cada pase de cambio. Uno puede manejar un auto y mientras lo hace puede ir hablando con el acompañante, sintonizando una radio, pasando temas en un CD, tomando algo de la guantera, etc. es decir que con el tiempo el manejar un automovil es como caminar, uno va haciendo otras cosas y ni sabe que está caminando, es algo reflejo.
En una moto en ninguna circunstancia es así, siempre hay que estar en lo que se está haciendo, hay que estar en cada cambio, en cada frenada, en cada movimiento, doblando con todo el cuerpo, no solo con las manos, pensando en los próximos autos a sobrepasar, etc.
En fin cuando quiero encontrar el placer de moverme en tierra firme, lo encuentro en una moto.